Cómo afrontar las crisis en las organizaciones motivadas por ideales
Luigino Bruni
Editorial Ciudad Nueva,
Argentina 2017
La teoría de la innovación le permitió a Schumpeter explicar la alternancia de fases expansivas y recesivas en el ciclo económico, donde las innovaciones no se introducen en medida constante, sino que se concentran en algunos períodos (generalmente luego de una gran expansión sigue una recesión) en los cuales la economía retorna al equilibrio del flujo circular. Un equilibrio que no es igual al precedente sino “modificado por la innovación”.
Sin duda que la elección de la fórmula schumpeteriana “destrucción creadora” ha sido un hallazgo en Luigino Bruni –en primer lugar, porque su empleo en este libro rompe con los habituales lugares de utilización– aplicándola a la corriente de las denominadas “organizaciones motivadas por ideales (OMI)”.
Sabemos hoy que, con el desarrollo de la responsabilidad social organizacional, diversos modos de analizar el funcionamiento y las dinámicas intra y extra empresariales superaron el umbral de su aplicación a organizaciones puramente comerciales o lucrativas; y estos modos se aplican también en la evaluación de organizaciones sin fines de lucro, civiles, de la economía social, popular, cooperativas, etcétera.
Las OMI, en su historicidad, deben tener la conciencia de que su razón de ser, su “motivación ideal” siempre será la de “apuntar a un bien mayor que ellas mismas” donde la vida institucional no ahogue la vitalidad y la idealidad del carisma. Si bien la institucionalidad es imprescindible para que el carisma de sus fundadores no muera con ellos, corre el riesgo de diluir la fuerza transformadora y siempre nueva de los carismas, convirtiéndolos en “edificios inmuebles” e inmueble es igual a inmovilidad, lo opuesto al dinamismo del espíritu.
Recibimos y celebramos este nuevo aporte de Luigino Bruni que nos permite reflexionar a nivel personal y comunitario, la urgencia de no abandonar los sueños, los ideales, los carismas que invitan a “transformar y reformar” la realidad.